Belleza
En el curso del verano he estado en lugares tan hermosos como éste: una plaza enorme festoneada de flores moradas. O tal vez fueran lilas, o púrpuras, pues mi amiga A. insiste en que no se discute de colores con un hombre. Pero lo más hermoso estaba debajo. Y no crean que hay que rascar mucho. Bastaría un gesto de la mano para que, como por arte de magia, aparezca.
2 opinan
No debo saber la palabra mágica, porque he hecho todos los gestos que me sé... y no ha aparecido nada.
Anónimo a las 11:05 a. m.Haces chas... y aparezco a tu lado. :)
Anónimo a las 5:43 p. m.(Buscando copos encontré un recuerdo congelado.)
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