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Mi himno (me lo robaron)



    Ahora que ya pasó la resaca informativa del simpático patinazo del COE y su intento de dotarnos a los españoles todos de un cantabile para los eventos deportivos, se me ocurre que en esta materia lo mejor es la vía asturiana: agarrar una canción ya conocida, con valor sentimental acreditado y bien instalada en la memoria ROM del populacho, y tirar p'alante. ¡Aunque digan que es una canción de borrachos!
    Así que aquí va mi propuesta: adoptemos como himno oficial el que ya lo es a título informal. Les reproduzco las primeras estrofas, para que comprueben con pavor como también ustedes --sí, tú también-- se la saben.

            Entre toros, fandanguillos y alegrías,
            nació mi España, la tierra del amor,
            nunca Dios pudo igualar tanta belleza
            y es imposible que pueda haber dos.

        España ha sido siempre y lo será
            eterno Paraíso sin igual.


Aparte que los royalties irían para el señor Escobar, que como muchos saben es un mecenas de las artes plásticas. Con todo mis respetos para los parados de Alcobendas. Si, ya saben, aquel pueblo-dormitorio donde buscaban piso Tarzán y su puta madre. Miren: otro himno natural. Si es que cuando me pongo...





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Géneros


ACTA DE LA JUNTA GENERAL ORDINARIA CELEBRADA POR LA COMUNIDAD DE PROPIETARIOS DE LA FINCA SITA EN LA AVDA. DETALYCUAL, 26, EL DIA 19 DE DICIEMBRE DE 2007


    En Madrid a 19 de diciembre de 2007, sinedo las 20:45 horas y en segunda convocatoria [....]



    La reunión se convierte en un cruce de acusaciones entre los propietarios, así como en un intercambio incomprensible de opiniones, incluyendo faltas de respeto entre los propietarios, haciendo imposible el desarrollo de la reunión.
    Después de un largo rato se consigue reconducir la reunión y se procede a la votación de sei se quiere acometer la reparación integral de la fachada o tan sólo la reparación parcial de la misma, siendo el resultado el siguiente: [....]




    A veces la literatura de terror adquiere los formatos más insospechados.

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Se va a liar (2)


    Lo que ya sería la bomba es que la RAE admitiera en su virreinal seno a un autor de blogs: un Casciari, por ejemplo, ahora que Erlich ya publica en El País digital.
Ah, no, que Casciari es argentino.

Por cierto, oí en la radio que al heredero de la corona también le pareció un truño Deseo/peligro, la presunta peli de Ang Lee. Cada vez me cae mejor este chaval.

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Se va a liar



    Los de Bellas Artes han hecho académico a Curro Romero (y me gustaría leer la satisfacción de Joaquín Vidal en tal día como hoy) y se va a liar.
    Porque, como dice el Ecclesiastés, el número de los antitaurinos es infinito. Igual que el de los taurinos. Servidor, la verdad, habrá acudido a los ruedos más veces a ver cantantes de izquierdas que toreros diestros, pero la cosa me cuadra del todo. Que me parece estupendo.
     Y que conste que no espero gran cosa de las academias, que son como las juntas de damas de la cultura. No. Pero al menos ésta se la juega, arriesga, y lleva ya tiempo invitando a a cineastas, diseñadores y fotógrafos. En cambio, los de la lengua, la última audacia que cometieron fue admitir a un autor de best-sellers con pésimos modales. Dónde va a parar.
     O sea, que se va a liar.
     Pero hay que prepararse, que al paso que vamos acabarán entrando los de las instalaciones. Y eso va a ser ya el cáguense.




© ilustración El Roto

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El preso número 9


    ¿Te acuerdas de aquello? Lo cantaba Joan Baez, con ese soniquete gringo que alicataba su voz nasal. Todo un himno a la violencia de género:
        Dice así al confesar
        Los maté sí señor
        Y si vuelvo a nacer
        Yo los vuelvo a matar.


     Ahí es nada. Y no te creas, que lo cantábamos aferrados al falsete como si fuera aquello de "sigo siendo el rey". Lo que quiero decir es que eran tiempos en los que El Caso publicaba día sí-día también noticias de "crímenes pasionales", que bajo el lema "La maté porque era mía" formaban parte de nuestra idiosincrasia ibérica, junto con los tricornios, los sabañones y la sangría.
    O sea, que visto lo visto, el optimista que tengo de inquilino diría que vamos a mejor.
     Claro que al optimista que habita en mí hasta le parece que el discurso catastrofista de la educación no se tiene en pie, por más que se empeñen los nostálgicos del bachillerato antiguo. O sea, que estará equivocado, como de costumbre.

© foto: Dan Strange

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Lágrimas



    Volví a ver el otro día a B., al cabo de...bueno, de un montón de años. Calculo que la última vez que nos vimos andaría yo por los once, como mucho, ella algo menos. En realidad, no la reconocí, sino que imaginé que era ella, aunque es cierto que no podía ser otra.
    B. fue algo así como mi primera novia. Y no tanto porque nos gustáramos, que creo que nunca hubo esa química, como porque los mayores que nos rodeaban, sus padres y los míos que eran amigos, las chicas que nos cuidaban también, nos habían adjudicado el papel. Decían que hacíamos buena pareja, los dos morenos de cabello y piel, los dos de ojos grandes e intensos. Ya saben, esas cosas que a uno le molestan tantísimo cuando tiene ocho años pero que, si te descuidas, acabas repitiendoaños después.
    Imagino que, si las cosas siguen como hasta ahora, es fácil que no vuelva a ver a B. más allá de un par de veces más. En mi vida. Me presentó a su marido; le hablé de mis hijos (del mayor y del pequeño). Poco más, apenas diez minutos de charla, rodeados de gente.
    Aunque, después de.. bueno, de un montón de años, B. y yo estuvimos charlando un rato.
     Y luego lloramos juntos.



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Grandes inventos (2)



    También cavilaba que esto de los blogs es un gran invento.
    Aunque me preguntaba --me pregunto a veces-- si éste lo escribo yo con la cabeza, con los pies, o con el culo.
    Cosas que le dan por pensar a uno.



© foto: Tenz1225

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Grandes inventos de la Humanidad



    Cavilaba el otro día --o quizá lo leí hace tiempo en alguna parte-- que hay dos clases de inventos: aquellos que nos permiten hacer lo mismo que ya sabíamos de una forma más eficaz (y eficiente) y los que nos permiten hacer algo completamente nuevo. Digamos el fuera-borda y el globo aerostático.
    De los primeros, se me ocurría que había a su vez dos clases: los que permiten hacer algo con las mismas partes del cuerpo y los que introducen formas de hacerlo con partes distintas. Llamemosle por ejemplo homotopos y heterótopos. La cocción de los alimentos o la bicicleta serían ejemplos de lo primero. En cuanto a los segundos, pensaba que son especialmente importantes los que permiten emplear para la misma tarea partes, digamos, menos nobles del cuerpo: hacer con los pies lo que sin ellos hacíamos con las manos, o con un dedo lo que antes requería dos brazos fuertes. La lavadora, por poner un caso, o el cubo de basura con pedal.
    Claro que pensando ejemplos se me vino a la cabeza la excepción que confirmaría la regla. Sí, eso mismo: el mando a distancia.

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