<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d6937146\x26blogName\x3dIdeas+brillantes\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://ideasbrillantes.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://ideasbrillantes.blogspot.com/\x26vt\x3d-7417641204195255112', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe", messageHandlersFilter: gapi.iframes.CROSS_ORIGIN_IFRAMES_FILTER, messageHandlers: { 'blogger-ping': function() {} } }); } }); </script>

« Home | Next » | Next » | Next » | Next » | Next » | Next » | Next » | Next » | Next » | Next »

Navidades adultas



      De las Navidades me gusta casi todo. Me gustaban cuando era niño, aunque mis padres no eran especialmente devotos (¿se creerán que nunca me llevaron a la cabalgata de Reyes?). Guardo recuerdos especialmente cálidos de unas  en la casa familiar de Galicia, mi hermano y yo los mayores de los nietos, agasajados permanentemente por una tropa inagotable de tios y tías solteros. Después, me han gustado las cenas de nochebuena en familia y las nocheviejas a machete hasta ver  amanecer. Aún me gustan.
      Con mis hijos, he descubierto otra forma de vivirla, a su servicio, pero también muy divertida. Yo --nosotros-- sí les llevamos a las cabalgata.
      De las Navidades me gusta casi todo: la cena del curro, los polvorones, la carta a los Reyes, el arbol y los belenes, el mercadillo de la Plaza Mayor, la iluminación callejera, enviar y recibir felicitaciones, el vermú del 24, los regalos, pero sobre todo el reencuentro con la familia, o parte de ella. Esos tíos y tías ahora ya casados y con hijos mayores, a los que quise y quiero tanto (quizá porque sólo les veo en ocasiones festivas).
      Ahora bien, se lo advierto por si no les ha tocado aún. Uno no pasa a la madurez hasta que no le toca encargarse de dar la cena de nochebuena. De consumidor a proveedor. Ese es el gran salto.
      Y que no les engañen: de consumidores vivíamos mejor.


      Felices fiestas a todos-todas.


Etiquetas: ,

0 opinan

Responde