Ajustes
Suben los tipos de interés --y no, no me refiero a ese asombroso proceso por el que Brad Pitt se va pareciendo cada día más a Robert Redford. Digo que suben los tipos, las bolsas bajan -- y no, tampoco me refiero al inexorable efecto de la gravedad sobre las siliconas de Ana Obregón. Las constructoras empiezan a tener problemas para colocar los pisos que antes les quitaban de las manos.
Y los que llevamos años haciendo de agoreros del pinchazo de la burbuja inmobiliaria empezamos a pensar que tal vez no estábamos del todo errados. Y cuando oigo hablar a los propagandistas del aterrizaje suave, me acuerdo de un viejo chiste de Forges, en el que el pasajero de un avión que cae en picado pregunta: "¿Vamos a tomar tierra?". Y el piloto responde: "Te vas a hinchar, macho".
O sea, que si no tienen el cinturón de seguridad inmobiliario puesto, más vale que empiecen a pensar en hasta dónde pueden apretárselo.
Etiquetas: Políticas, Reflexiones
1 opinan
¿Donde está la bolsita para momitar?
Anónimo a las 11:50 a. m.Responde